El trabajo de un DJ profesional puede ser variado y va a depender, entre otras cosas, de su lugar de trabajo. Un DJ tiene la responsabilidad en gran parte del éxito o fracaso de una fiesta o evento, y lo manejará evaluando los gustos de los presentes para conseguir un nivel de energía adecuado al momento y lugar.
Cuando se te vino a la mente contratar un DJ, seguramente lo hiciste pensando que se trata de una persona poniendo música sin parar durante todo el evento. Sin embargo, la función de este profesional va más allá de eso.
Un equipo de Dj puede crear, recrear, componer, producir y dirigir las exigencias musicales de un lugar o ambiente, siempre aportando sus conocimientos en el área para ofrecer un trabajo de calidad. Esta persona se encargará de seleccionar, mezclar, reproducir y difundir la música perfecta y que vaya en sincronía con el tipo de público o invitados.
Una de sus funciones que caracteriza a los DJ es la habilidad de manipular el ritmo, la velocidad (BPM) y las características sonoras de cualquier canción. Así, el DJ profesional es capaz de transformar la música y lograr sensaciones de felicidad y euforia en su público.
Pero, el trabajo del DJ no solo se limita a controlar la música en un evento y a llevar el ritmo del mismo, sino que también un buen DJ actuará como animador y logrará mantener la fiesta lo más divertida posible.
Para esto, los equipos de DJ profesionales hacen el mejor uso de los micrófonos para incentivar a su público a participar de la pista de baile. Incluso, hay quienes hasta guiaron a los mismos a seguir coreografías. ¡Todo por mantener el mejor ambiente!